martes, 11 de noviembre de 2014

La Tragedia de Torrejón

AL FILO DEL MEDIO SIGLO DE LA TRAGEDIA DE TORREJÓN

 El viernes 22 de octubre de 1965 --el próximo año se cumplirán los cincuenta--, las escasas noticias que, a cuentagotas llegaban a Cáceres provocaron una honda conmoción entre los vecinos de la capital, así como en Torrejón el Rubio, Trujillo, Jaraicejo, Monroy, Malpartida de Plasencia, Arroyo de la Luz, Almaraz, Serradilla, Jaraíz de la Vera, Serrejón, Aliseda..., pueblos de los que procedían los 4.000 obreros que trabajaban  en las presas del Tajo y del Tiétar, situadas a cincuenta metros una de otra, y que construía la empresa Agromán para Hidroeléctrica Española en el término de la primera localidad.. La tragedia produjo 70 fallecidos, aunque oficialmente se dio noticia de 54, el mayor accidente laboral sufrido hasta la fecha en Extremadura, y cuyas causas jamás se supieron.

La historia se inició en 1959 cuando comenzaron a construirse las citadas presas para el aprovechamiento hidroeléctrico del Tajo, que permitía, a través de un túnel, trasvases entre ambos ríos, según recuerda en el capítulo "La tragedia del salto de Torrejón" la web "Extremadura misteriosa". Los obreros vivían en dos poblados: el de los obreros, junto al lecho del río, y el poblado alto, en el que vivían los oficinistas, ingenieros y técnicos. En la Extremadura pobre de los años sesenta, aquellos obreros se sentían afortunados: tenían casas con agua y luz, un pequeño hospital, cine, baile, servicios de autobuses que les unían con Plasencia...; ganaban entre 3.000 y 4.000 pesetas de la época, según categorías, recuerda Rosa Escobar, coautora de "Los saltos de Torrejón: una historia por contar".

 El otoño de aquel año fue muy lluvioso, especialmente este mes de octubre. Los técnicos forzaron al límite la capacidad de embalse para probar los aliviaderos. La construcciones estaban muy adelantadas. En el momento del accidente se encontraban trabajando en el túnel unos 50 obreros y otros 50 en el lecho seco del río. Los propios obreros iniciaron el rescate de sus compañeros y quienes, al día siguiente, no se encontraban en casa o en sus puestos de trabajo, fueron dados por desaparecidos.

 El mismo viernes 22, el entonces periódico vespertino, "Diario Extremadura", informaba en su página 9 que "el accidente ha sido provocado al ceder una rejilla de la presa, produciéndose la consiguiente corriente de agua", y daba cuenta de que se había producido un muerto y varios heridos.  El lunes 25, en la página 4, titulaba a cinco columnas: "En la presa de Torrejón continúan a ritmo acelerado los trabajos de rescate" y subtitulaba: "Han sido recuperados siete cadáveres". En la crónica se habla de los primeros rescates, del día de luto declarado en la fecha anterior en Torrejón y de los trabajos en el túnel siniestrado, así como del desembalse a un ritmo de 2.000 metros cúbicos por segundo, lo que produjo a las seis de la tarde del día anterior "la pérdida de más de 82 millones de metros cúbicos". Otras fuentes hablan de 140 millones de metros cúbicos desembalsados, a 2.000 diarios. En su edición del día 26,  cifra en nueve el número de muertos y descarta la posibilidad de hallar con vida a los más de treinta desaparecidos. En la edición del miércoles 27, eleva a veintitrés el número de muertos.

 "La tragedia fue envuelta entre el silencio y olvido del régimen franquista; las presas jamás fueron inauguradas y Franco no vino, a pesar de tener previsto, ni se dio ningún tipo de explicaciones al respecto. Los supervivientes se diseminaron por toda España. Cada viuda recibió 20.000 pesetas y 5.000 por cada hijo", según "Extremadura misteriosa".


         La tragedia afloró otras pequeñas tragedias humanas conocidas a partir del suceso. Al cumplirse los 38 años del accidente, Francisco Cabanillas escribe en El Periódico Extremadura del 19-10-2003 la historia de un padre que "falleció de la impresión al conocer la noticia", pues tenía dos hijos trabajando en las obras de la presa y murió cuando era trasladado a Plasencia. En la catedral nueva de esta ciudad fueron oficiados el 4 de noviembre unos solemnes funerales por las víctimas. Las hijas de Agustín Oliva Sanguino, natural de Arroyo de la Luz, pudieron hallar, cuarenta y dos años después, los restos de su padre en el cementerio de Toril, gracias a una carta remitida al Ayuntamiento de la localidad por el juzgado de Navalmoral, que fue a parar a una tía que no sabía leer, y que guardó en una caja que sus sobrinas hallaron haciendo limpieza, según una crónica publicada en el diario Hoy el 15-06-2007.

 El 10-02-2013, el programa de Canal Extremadura TV "El lince con botas" emitió en la citada cadena un magnífico reportaje titulado "La tragedia del salto de Torrejón", con entrevistas a algunos de los protagonistas de la época. "Fue una obra rentable y de un drama colosal, del que nunca se supo", concluía diciendo. Rosa Escobar recordaba que los medios informativos se referían más a la obra que a la tragedia y a los responsables de lo que pasó, y a cómo aludían a la raza extremeña y a su capacidad de sufrimiento. Paquita Marcos, pequeña entonces, recordaba cómo en febrero del 66 se produjo una evacuación de las mujeres y los niños del poblado mientras los obreros continuaban trabajando en las presas, lo que consideró "una humillación". Antonio Marcos, antiguo habitante de Torrejón, relataba que "más que ahogados, muchos obreros murieron por traumatismo". Rosa Marcos recordaba el acto de arrojo de José Martín quien, con su grúa, logró salvar a más de 50 obreros. El mismo cifra los muertos en 60 y cree que los otros diez murieron en accidentes laborales anteriores. Hasta nueve meses después, señalaba Antonio Marcos, continuaron apareciendo cuerpos. "Fue una negligencia como un camión. Se quiso hacer el trabajo en menos tiempo."

Tal día como hoy, cuando las primeras noticias llegaron a Cáceres, sobre la ciudad caía una densa lluvia y los braseros y estufas hacían su aparición. Sólo sus familias recuerdan hoy a los fallecidos y a los desaparecidos. Una placa --recordaba el citado programa televisivo-- recordaba hasta hace poco los nombres de las 70 víctimas del accidente.

Enlace:  http://digitalextremadura.com/col/72/felix-pinero/


                              VIDEO DE CANAL EXTREMADURA




El otoño de 1965 fue lluvioso en Monfragüe, especialmente a mediados de octubre. Faltaban pocos meses para finalizar los trabajos en las presas sobre el Tiétar y el Tajo, y una concatenación de circunstancias provocó el más grave y trágico accidente laboral de la España contemporánea, cuyas causas nunca se conocieron. Una tragedia condenada a un olvido extraño, injusto e interesado, sobre la que cayó un silencio despiadado. Una historia que dejó a sus espaldas una obra rentable y un drama colosal, un drama del que nunca más se supo.
           
                                         
 http://www.canalextremadura.es/alacarta/tv/videos/el-lince-30-la-tragedia-del-salto-de-torrejon-100213

domingo, 9 de noviembre de 2014

LOS CABALLEROS DE LA SIERRA





Con este respetuoso y distinguido nombre se conoce en Tornavacas, Valdastillas y otros pueblos de la serranía valjerteña a los 'Maquis', los últimos idealistas que comba¬tieron por estos montes con la esperanza de conseguir la utopía política de derrocar al régimen de Franco. No pretendemos historiar la resistencia antifranquista de estos sacri¬ficados guerrilleros ni tampoco reproducir testimonios orales con valor documental, sino comprobar cómo esta épica postrera, protagonizada por los valientes Caballeros de la Sierra, ha dejado su impronta narrativa en la tradición popular valxeritense.

Siempre le choca a uno que todavía, cuando interrogas a los informantes sobre los Maquis, la gente baja la voz, mira recelosa a los lados y te confidencia tal o cual anéc¬dota sobre los Caballeros de la Sierra. Un resabio heredado del secretismo y el tabú que gravitaban sobre estos temas en los años de la Dictadura, la cual sigue condicionando y actuando por inercia en la mentalidad popular.

La leyenda, cuchicheada más que abiertamente contada, ha ido forjando una imagen mítica de estos guerrilleros. Se les supone desafiando a los persecutores, bajando por las noches a los pueblos, paseándose por las calles, entrando en las casas de los ricos, e, incluso, bajando a bailar en las fiestas de los pueblos serranos (El Torno) y otros atrevi¬mientos y arrogancias llevadas a cabo por los Caballeros de la Sierra. En Navaconcejo aluden al mitin que dieron los maquis en la llamada Casa Blanca, por bajo de los Carozos, en el camino de Rebollar, al que acudieron militantes de izquierdas que luego fueron detenidos.

Pero lo normal era que se mantuviesen escondidos en covachas y casillas de campo. En la sierra de Tormantos, próxima a Valdeinfiernos, se encuentra la Cueva de los Maquis, al pie del Regajo del Toro. Esta partida rondaba por toda esa umbría jerteña y llegaba a provisionarse a los majadales tornavaqueños, según explica una informante, cabrera por más señas:

Nos pagaron mu bien los quesos que se llevaron. "Cuando aquello, tendría yo
unos veinte años y mi hermano, que estaba conmigo, un par de ellos menos. Los
padres habían bajao al pueblo a por el avío y nos habíamos quedao solos. A eso
del atardecer se presentó media docena de ellos y yo na más verlos me dije que
tenían que ser los Caballeros de la Sierra, de los que tantos nos habían hablao
los padres. Nos saludaron mu educadamente y enseguía se empezaron a meter
con lo dura que era la vida que llevábamos, que si ellos mandaran nos iban a
tener mu bien atendíos. Luego dijeron:
- ¿Tiene usté suministro pa darnos de comer?
- Poco hay, porque los padres han bajao a por el avío.
- No, si ya lo sabemos que se han ío p'al pueblo. Mire usté, nos conformamos
con poco, asin que nos repartimos lo que haya.

Teníamos dos panes de esos grandes y nos dejaron uno. También cogieron cuatro o cinco quesos. Luego el Jefe, que era algo gordo, sacó un fajo billete y nos dio dos mil pesetas. Y me pidieron un poco de leche.

Yo llamé a mi hermano, que se había metió p'adentro, to asustaíto, y salió pa ordeñar las cabras. Los hombres se tomaron casi una cántara allí mismo. Cuando llevaban andao un poco, el Jefe regordete, se volvió y me dijo:
- Yo creo que la hemos pagao poco...
- No, no, ya me han dao ustedes dos billetes grandes...
Al poco de irse, le tuve que preparar a mi hermanito una tila, de lo nerviosito que se había puesto.

Y a mí lo que más me impresionó fue lo bien vestios que iban, con trajes bue¬nos de pana negra, con unas linternas que alumbraban mucho más que los car¬buros nuestros, y llevaban escopetas de dos caños.

Esos maquis tenían que ser los que estaban en la cueva de Cabezuela. Según parece los surtía un muchachillo de catorce o quince años, que debió de asus¬tarse cuando le interrogaran y los declaró el sitio onde estaban. Subieron los móviles de la guardiacivil y tuvieron un tiroteo de aquí te espero. Tengo enten¬dió que murieron dos guardias y dos o tres maquis, a mi, dende luego, no vol¬vieron a molestarme más".


(Fuente oral: P. B. Tornavacas)

Según las informaciones recogidas, los maquis mostraban su buen corazón con los niños. Les querían remediar el lógico susto que su presencia provocaba en los menores, obsequiándoles con alguna golosina. Así les ocurrió a unos muchachos de Piornal:

Nos dieron chocolate. "Esa nochi nos queamus solus los tres Primus, en la , finca que estaba cerca de la casería. Los padris se habían marchau al pueblu. Al anochecé llegarun cuatru o cincu señoris. La casa era bastanti grandi, tenía dos plantas y nosotrus andábamos en la de arriba. M´acuerdu que yo estaba pelandu patatas pa poner un carderu pa la cena. Se presentarun de repenti.

-"Buenas nochis", dijeran y nosotros ti-ti-ti-ti, venga a temblar, alli solinus los tres.

Entoncis le dijerun a D., que era el mayor de nosotrus, que nos llevara a la otra casa de más arriba, que era también de unus familiaris. Comu yo y mi primu, que eramus los más chiquininus, seguíamos dandu tiritonas de la impresión, el que parecía el mandamás, que me paeci que le llamaban “Adivinu”, diju:

-Darlis unas castañas de chocolati a estus chavalis, a ver si dejan de temblar los pobrecinus.

No las habemus pasau peol en toa nuestra vida. Los maquis pasaron la nochi en la casa y cenarun con nosotrus el cardu de patatas.

(Fuente oral: V. P. Piornal)


Disponían los maquis de colaboradores, que les suministraban la comida. Se trataba, -por lo general, de gente que vivía solitaria en el campo, de pastores aislados en sus majadales. Más que por afinidad ideológica, la colaboración era interesada, dado que los maquis pagaban muy bien los servicios prestados, si bien otros se vieron forzados a cooperar con ellos. Los maquis mostraban una gran movilidad , que despistaba a los civiles y somatenistas. Iban de los Rebellones o los San Jorge a la Solisa de Jerte, del Hornillo de Tornavacas a los Prados de la Médica, de Cabezuela. Se daban situaciones sorprendentes, en que la guardia civil estaba en una misma casilla, calentándose a la lumbre y preguntando al amo sobre los maquis, y éstos se encontraban refugiados en la planta superior, en el zarzo donde se secaban las castañas. Una vez contemplaron desde un zarzo a un grupo de mujeres desnudas. La anécdota es jocosa y sucedió en Navaconcejo.

Los maquis las vieron peloteras. "En esta parte de la Solana, en un sitio que llaman las Gallegas, había un grupo de mujeres cogiendo castañas. Al acabar, se metieron en la casa, que era un sequero, y como estaban empapaítas de la humedá esa tan pegajosa que sale en el otoño, encendieron una buena chasca. Se quearon peloteras, pa secar mejor la ropa. Mientras recogían las castañas habían estao mentado a los maquis, que solían andar por esta parte.
Salta una:
- Anda, que como llegaran ahora los maquis ;y nos cogieran a todas, velaquí, desnuítas como estamos, menúa nos iba a estar.

Y resulta que los maquis estaban en el zarzo de arriba, oyéndolas y viéndolas peloteras. Y ellas sin saberlo. No bajaron por no armarla, como había hombres trabajando con ellas, que estaban fuera de la casilla. Además, estaba con ellos uno que los suministraba y terció enseguía: - A esas ni tocarlas, que son mis primas...".

(Fuente oral: C. G. Navaconcejo)

Pero los episodios trágicos son los que abundan más en la vida azarosa de estos gue¬rrilleros. Los encuentros con las patrullas móviles de la guardia civil, apoyados por los miembros de los somatenes locales, se producían en los sitios más inesperados. Varios maquis murieron en la comarca. Hablan de un valiente maqui de Cabrero, que murió en los cotos de Navacebrera, tierra cercana a Plasencia. Las delaciones acarrearon gra¬ves consecuencias, como la del maqui 'Adivino', que denunció a sus correligionarios y a sus colaboradores. También se habla de extorsiones y secuestros por parte de los maquis del Valle, a una de cuyas partidas se achaca el haber dado muerte al alcalde de una aldea abulense, de Gil García.

Pero el suceso más funesto ocurrió en un pueblo de la Trassierra, Jarilla, donde los
'maquis', dirigidos por el comunista Fabián mataron a tres vecinos el 6 de noviembre
de 1946. El luctuoso hecho ha marcado la opinión de los informantes de esta localidad:

Llegaron al atardecer. "De los maquis esos es mejor no hablar. Menúa nos prepararon en este pueblo. Pos resulta que un día de otoño estábamos tan tranquilos, cuando al atardecer, ya pardeaba creo, empezaron a llegar unos pocos con armas. Cuando se hizo de noche ya eran cerca de veinte los que habían tomao el pueblo. Buena mos la armaron. Se metieron en las casas y cogieron to lo que quison, pero sobre tó, comida y dinero. Y sacaron a dos o tres vecinos y los afusilaron aquí mismo. Pa que vea usté, los tíos criminales...".

(Fuente oral: L. R. Jarilla)


FUENTE: Fernando Flores del Manzano. Mitos y leyendas de tradición oral en la Alta Extremadura. Editora Regional de Extremadura.

Enlace: http://lusipedia.blogspot.com.es/2009/01/los-caballeros-de-la-sierra.html
El Francés

LA MUERTE DE "EL FRANCES"
(Jefe de la 12 División de la 1ª Agrupación Guerrillera Extremadura-Centro)

Serradilla. 31 de julio de 1946.

Introducción / El encuentro / El lugar de su sepultura /La identificación de "El francés" /

Nota de prensa

Introducción.-
El 31 de julio de 1946 cae abatido en Serradilla uno de los más famosos guerrilleros que combatió al franquismo de la posguerra desde las sierras cacereñas. Se trataba del "maquis" Pedro José Marquino Monge (El Francés).

Sus dotes de organización y mando no fueron puestas en entredicho ni por sus guerrilleros ni por la propia Guardia Civil, para quien en la comarca era el "enemigo público nº 1".

Su persecución, sobre todo después de los sucesos de Mesas de Ibor (17 de abril de 1945), se hizo una constante entre las fuerzas de represión franquista. Guardia Civil, contrapartidas, somatenes armados, y delatores fueron cerrando el círculo en torno a este inteligente guerrillero y sus partidas hasta que una patrulla rural, compuesta por los números de la Guardia Civil destinados en Serradilla (4 guardias y Juan Martín Caldera, Cabo 1º comandante de puesto), previa la correspondiente delación, lo cercaron y dieron muerte.

Los Guardias Civiles fueron premiados por el hecho y "El Francés" fue enterrado como un bandolero, según terminología de la época, en el cementerio de Serradilla. Así era la guerra que continuaba en la sierra durante la posguerra civil.

Acababa así su lucha en la sierra [1]. Desde que aquel 19 de septiembre 1940 en que se fuga de la cárcel de Hinojosa del Duque (Córdoba), de donde era natural y donde se hallaba condenado a muerte, hasta el 31 de julio de 1946 en que la encontró en Serradilla, fueron muchas las acciones llevadas a cabo a la espera de una solución a aquella guerra que el franquismo quiso ocultar y que algunos, los "maquis", continuaban en espera de una solución que tardaría casi 40 años en llegar: el fin del régimen franquista.

No fue la suya una lucha solitaria. En las filas de la 12 División guerrillera de la Agrupación Extremadura-Centro que comandaba, se contaron varios guerrilleros serradillanos que tuvieron distinto fin: Emiliano Sánchez Mateos "encontrado", fue detenido en la sierra serradillana al poco de incorporarse a sus Partidas. Valentín García Real "gasolina", fue abatido por la guardia civil en Valdehúncar y al poco Leoncio Real Bejarano "silencio" o "sardina" en la guerrilla y "ratón" en Serradilla, se entregó en Navalmoral de la Mata.

Los guerrilleros no estuvieron solos. Una tupida red de colaboradores y enlaces se tejió en Serradilla en torno a la 12 División de "El Francés", pero los mismos tuvieron la misma suerte que los guerrilleros, cayendo en manos de las fuerzas de represión. El enlace Marciano Sánchez Martín "papilote" murió por disparos de la Guardia Civil en Villareal de San Carlos, y otros sufrieron varios años de prisión por colaborar con el "maquis".

El fin del activismo de todos los guerrilleros y enlaces serradillanos que mencionamos tuvo lugar durante 1946, año trágico para los "maquis" cacereños. La muerte, en septiembre de 1946, de Jesús Bayón González, "Comandante Carlos" [2], jefe de la Agrupación guerrillera Extremadura-Centro a la que pertenecía la 12 División de "El Francés", dió casi por finalizada la lucha guerrillera en el entorno.

Ahora, en el año 2001, se ha abierto el proceso de rehabilitación de estos "luchadores por la libertad". El 16 de mayo de 2001 el congreso de los Diputados, a propuesta de IU, aprobó la rehabilitación de los "maquis" atendiendo a una deuda histórica [3].

La Asociación Cultural "Tierra Viva" de Serradilla, en cuanto que su agreste término municipal fue lugar de dicha confrontación, ha decidido participar en el proceso de la rehabilitación. Y lo iniciamos por el final pues tiempo habrá de explicar el principio y el activismo guerrillero, labor de investigación en la que nos hallamos inmersos.

El encuentro.-
Quizás sea esta una de las cuestiones mas controvertidas dado que no contamos con testigos vivos que estuvieran presente en el hecho. No obstante en su día fue comentado el Serradilla el hecho y, quizás, de forma distorsionada, nos han llegado algunas referencias.

El día 29 de julio de 1946 - nos informa el guerrillero Gerardo Antón Garrido "Pinto" - abandoné la compañía de "El Francés" para dirigirme a Pozuelo de Zarzón. "El francés", en compañía de "el relojero", se dirige a recoger información a una estafeta en Serradilla [4]. Según los primeros testimonios recogidos en Serradilla (pendientes de confirmación), la posición de "El Francés" fue indicada a la Guardia Civil por "Lucio" y "El Pilfa", los cuales recibieron una gratificación de 30.000,-ptas cada uno. No obstante "Pinto" nos afirma que sus posiciones y movimientos fueron denunciados por el cabrero Eusebio Montero "el maqui", natural de Cabezabellosa.

Fuere como fuere lo cierto es que en la noche del 30 al 31 de julio de 1946 Pedro José Marquino Monge "El Francés" se hallaba en la Umbría de Peñafalcón (Cuarto de Entre Arroyos) de Serradilla, donde le dieron muerte, tras ser localizado por fuerzas de la Guardia Civil. Sobre las circunstancias en las que acaece la muerte de "El Francés" han existido versiones variadas, que resumimos del siguiente modo:

El encuentro se produce en una situación en que tanto los guerrilleros como los guardias civiles estaban presos del miedo. Los maquis vieron primero a los guardias civiles, pero, aún teniéndolos a tiro, no dispararon al pensar que podía haber mas Guardias Civiles (así lo informó "Durruti" en su detención llevada a cabo el mismo día). La sensación de los maquis era que estaban rodeados, algo que relativamente era cierto, pero por pocos números de la Benemérita, por lo que, de haberlo sabido, hubieran podido intentar la fuga. Al primer disparo el guardia civil Fernando Canelo salió huyendo en dirección a la barca de "peseta", en la desembocadura del arroyo Barbaón, perdiendo en su huida una bota que no volvió a buscar. En la refriega hubo cruce de disparos y algunas versiones apuntan que también se tiraron bombas de mano que produjeron un pequeño incendio.

En el tiroteo "El Francés" - dicen otros - fue herido de un primer disparo y, no pudiéndose mover, pidió auxilio a los guardias civiles, indicándoles que se entregaba sin resistencia (algo prohibido por el código guerrillero), pero los guardias civiles no se atrevieron a acercarse hasta el amanecer, hallándolo muerto, desangrado, con una pistola montada y en posición de disparo en sus manos. Otros dicen que tenía un fusil ametrallador. Su posterior traslado a Serradilla, al amanecer, se produjo a lomos de un mulo tomado prestado de una de las fincas privadas sitas en las inmediaciones, cuestión en la que coinciden todos los testimonios.

Lo que no hay duda en todas las versiones es que participaron todos los números del puesto de la Guardia Civil de Serradilla: El Cabo 1º, comandante de puesto, Juan Martín Caldera, y los Guardias Civiles Francisco Canelo Rodríguez, Antonio "el gallego" y otros dos más que aún no hemos podido identificar.

Tras el hecho del abatimiento la Guardia Civil de Serradilla, dirigiéndolo al Juez Municipal de Serradilla, hace el siguiente informe extractado con el objeto de proceder a la inscripción de la defunción [5]:

"Como consecuencia de un encuentro sostenido en la madrugada de hoy por fuerzas de la Guardia Civil de este Puesto con un peligroso bandolero de la sierra en el sitio de Peña Falcón, el cual fue capturado muerto por la fuerza, espero merecer de V. me autorice para dar enterramiento del cadáver en el cementerio del Depósito de esta localidad.

Dios Guarde a V. muchos años.

Serradilla 31 de julio de 1946.

El Capitán Juez Instructor.

(Consta la firma y rúbrica de José .(ilegible). Alemán).

Al margen, en letra manuscrita con pluma, consta la anotación de "Pedro (a) "Francés" de Villanueva del Terrible (Córdoba) [6].

Jesús Martín Caldera, Cabo 1º Comandante de puesto de Serradilla, participe en el hecho del abatimiento del "bandolero", lo puso en conocimiento de sus superiores de forma inmediata, motivando el desplazamiento a Serradilla, en el mismo día, del referido Capitán Juez instructor, que instruye las correspondientes diligencias. Al Cabo 1º, por su participación en el hecho, parece ser le fue concedida medalla al mérito militar, con distintivo blanco, con aumento de sueldo.

El día 1 de agosto, conforme a los anteriores datos y por orden del Capitán Juez Instructor indicado, portando el oficio el guardia civil Francisco Canelo Rodríguez (así se hace constar en la certificación de defunción), se procedía a inscribir en el libro de defunciones de Serradilla (folio 11) a Pedro (a) Francés. Firman el acta el Juez de Paz, Pedro Sánchez Mateos, el secretario, Abundio Blázquez Sánchez y los testigos Julián Díaz Garrudo y Teodoro García Antón [7].

En cuando a los datos de filiación y demás circunstancias hechos constar se indica, de 32 años de edad aproximadamente (realmente tenía 33), cuyos demás datos se ignoran, natural de Villanueva del Terrible (Córdoba), que falleció en Umbría de Peña Falcón el día de ayer, de madrugada, a consecuencia de traumatismo según resulta de autopsia [8].

El oficio por el que se ordenada la inscripción iba acompañado de otro certificativo, el de autopsia, igualmente dirigido al Juez de Paz de Serradilla. El mismo dice así [9]:

DON FRANCISCO HERNANDEZ HERNANDEZ, LICENCIADO EN MEDICINA Y CIRUGIA CON EJERCICIO EN SERRADILLA, MÉDICO TITULAR DE LA MISMA.

CERTIFICO: Que según se desprende de la autopsia practicada en el día de hoy a un individuo hallado en el sitio denominado Peña Falcón de este término, conocido por el bandolero de la Sierra Pedro (a) "FRANCES" sin apellidos conocidos, murió a consecuencia de los tiros que recibió en su cuerpo por el dictamen de autopsia.

Y para que conste a los efectos en el registro civil correspondiente, se extiende el presente en Serradilla a treinta y uno de julio del año mil novecientos cuarenta y seis.

Pese a que en su certificado de defunción constaba como causa de la muerte la de "traumatismo", lo que nos hizo presumir que pudiera haber sido por alguna paliza, despeñamiento o similar, lo cierto es que murió por varios disparos de arma de fuego (tiros - se dice -, en plural).

Diversos testimonios recogidos nos confirman que el mismo llegó hasta el cementerio trasladado a lomos de un mulo, entre dos sacos de paja. Fue sepultado por Simón, el pregonero y enterrador, en tierra y tan solo envuelto en una sábana. Todos los testigos quedaron impresionados por las condiciones en que se llevó a cabo dicho enterramiento [10].

El lugar de su sepultura.-
Respecto del lugar donde se le dio sepultura, en el anverso del certificado de autopsia antes aludido, y escrito con distinta máquina de escribir, leemos:

"NOTA.- El cadáver a que se refiere esta certificación ha sido sepultado en el Cementerio Sur de esta Villa en la Fosa nº 186 del mismo, a la profundidad de 1,25 mts. y distante de la pared Norte 7,50 mts.; de la del Sur 35 mts.; de la del Este 8,30 mts y de la del Oeste 24 mts."

En la inscripción de defunción también se hizo constar la fosa nº 186 del cementerio Sur.

En virtud de estos datos, lo suficientemente ilustrativos al establecer las coordenadas exactas del enterramiento, decidimos comprobar si dicha tumba aún existe en el Cementerio Municipal. A tal efecto, varios miembros de la Asociación Cultural "Tierra Viva" comparecieron, levantando la siguiente:

ACTA DE COMPROBACION

"Siendo las 14 horas del día 4 de noviembre de 2001, se constituyen en el cementerio municipal de Serradilla Alipio Barbero Antón, Carlos Jesús Martín Díaz, Santiago Cobos Díaz, Francisco Javier Cobos Gómez, socios de la Asociación Cultural "Tierra Viva", y los invitados al efecto José María Jiménez Díaz y Angel Martín Martín.

Seguidamente proceden a dirigirse al "Cementerio Sur", denominación que recibe el patio del cementerio existente a la derecha del pasillo de entrada, y que mira hacia el mediodía, con el objeto de verificar sobre el terreno los datos sobre el lugar de enterramiento del conocido como PEDRO DÍAZ MONGE (a) Francés.

En el patio se comprueba que se conservan algunas losas de suelo dispersas, distribuidas uniformemente en lo que en su día debió ser una organización de tumbas en cuadrícula dado que las que se aprecian a simple vista, pese a su dispersión, siguen una alineación horizontal y vertical respecto de otras mas separadas. Algunas de ellas se hallan numeradas en la parte posterior de las piedras o mojones que sirven de cabecero a la tumba, no hallándose ninguna reseñada con el número 186.

Inmediatamente se procede a la medición del ancho del patio del cementerio, resultando con una distancia total entre la vertical de los nichos de la parte este o saliente y los del oeste o poniente de 32,30 metros, confirmando la anotación documental de la que nos servimos.

Posteriormente, y sin eliminar la cinta métrica de medición del ancho, procedemos, formando ángulo recto, a tomar la medida de 7,5 metros desde la línea vertical de los nichos de la parte Norte de dicho cementerio, en dirección hacia el Sur, haciéndolo coincidir con la distancia de 8,30 metros indicados en la anotación documental base. No podemos constatar la medición desde la pared Sur por constarnos, por publicidad y notoriedad, que el cementerio ha sufrido dos ampliaciones en dicha dirección, derruyéndose dicha pared y reconstruyéndose de nuevo a mayor distancia.

Las coordenadas indicadas nos confirma un punto que se corresponde con el cabecero de lo que puede ser una tumba, orientada de Este (cabecero) a Oeste (piecero), siguiendo una horizontalidad y verticalidad absoluta respecto de otras tumbas mas alejadas.

Se halla la misma en la segunda línea de enterramiento, a la izquierda, según se entra en el patio, del paseo central asfaltado. Mirando de frente hacia la misma desde dicho paseo central, y en primera línea de enterramiento, se halla, a izquierda, una tumba con losa (creemos leer 198), sin nombre, y a derecha un panteón familiar.

La tumba localizada no tiene ninguna reseña o marca en el cabecero, ni presente losa de cobertura. La deducción es que, tal como indican los testimonios, el enterramiento del cuerpo se produjo directamente sobre la propia tierra, siendo cubierto por ésta.

Podemos igualmente apreciar, como túmulo de la tumba, una leve, casi inapreciable, elevación de la tierra sobre lo que puede ser la extensión de la misma. Dicho túmulo parece haber sido amortiguado por el paso del tiempo (55 años) y sucesivas nivelaciones del terreno. No existen hundimientos.

Y sin mas datos que constatar, se levanta la presente acta que suscriben los comparecientes, tomándose dos fotografías y realizándose un croquis del lugar".

La identificación de "El Francés".-
Como tuvimos ocasión de apuntar, al momento de su enterramiento Pedro (a) "Francés" no se hallaba verdaderamente identificado, por lo que las gestiones de la Guardia Civil tendentes a conocer los datos de filiación prosiguieron durante todo un año. En tal sentido, mas de un año después, se recibió un nuevo oficio en el Registro Civil de Serradilla que indicaba [11]:

"A los efectos de inscripción en el registro de defunciones de ese Juzgado de su cargo que tenga a bien acordar, me complazco en participarle que como resultado de las gestiones que se venían practicando por esta Comandancia, para venir en conocimiento de la filiación del bandolero apodado "Francés", muerto por fuerza de esta Unidad al sitio "Peña Falcón", de ese término municipal el día 31 de julio de 1946, se ha podido averiguar es PEDRO DIAZ MONGE (a) "Reprecioso", natural de Hinojosa del Duque (Córdoba), de estado soltero, nació el 29 de junio de 1913, hijo de Miguel y Leoncia, el que, por las fotografías que del mismo fueron remitidas, fue reconocido por sus familiares y personas que lo conocían con anterioridad.

Dios Guarde a V. muchos años.

Cáceres 12 de Agosto de 1947.

Lo suscribe el comandante Antonio González Medina, primer jefe accidental de la Jefatura de la 106 Comandancia de la Guardia Civil.

En virtud del mismo se procedió a llevar a cabo una segunda inscripción de defunción (folio 82), anulando la anterior (folio 11). La misma tuvo lugar el 13 de agosto de 1947, siendo inscrito con los datos indicados en el anterior oficio [12].

Sin embargo hemos podido confirmar que esta identificación no fue correcta. Solicitada una certificación de nacimiento al Registro Civil de Hinojosa del Duque la misma nos confirma los siguientes datos de filiación [13]:

PEDRO JOSE MARQUINO MONGE. Nacido en Hinojosa del Duque (Córdoba) a las 22 horas del día 29 de junio de 1913 (inscrito el día 30). Hijo de Miguel Marquino Peñalta, jornalero, y de Leoncia Monge Murillo, naturales ambos de la misma localidad, domiciliados en la calle Tintes, nº 31.

Queda así finalmente identificado con el verdadero nombre de PEDRO JOSE MARQUINO MONGE (a) El Francés.

Pero ¿por qué se le conoció e identificó como Pedro Díaz?. La razón, parece ser, la hallamos en la guerra civil. Durante la guerra civil Pedro, al igual que su hermano Manuel, luchó con el Ejercito de la República, perteneciendo en los primeros momentos a la columna comunista "José Díaz", nombre del secretario del PCE. Posteriormente, encuadrado en el ejercito regular de la República, fue ascendido al grado de teniente. Por ello pudo utilizar el apellido Díaz, acorde a su filiación política y sus comienzos militares.

Fuere como fuere con el apellido DIAZ era conocido por los guerrilleros que lucharon junto al mismo después de la guerra civil, en la sierra, y así lo indicaron todos sus delatores. Su uso, que trascendió en menores ocasiones que su apodo de "El Francés", se debió a la práctica habitual de intentar ocultar su verdadera filiación con el objeto que, de ser apresado, no pudieran ser identificados y represaliados sus familiares.

Pedro José Marquino Monje "Francés" también era conocido como el apodo de "Reprecioso", el cual - hemos confirmado testimonialmente con sus familiares - se corresponde con el apodo familiar de su familia en Hinojosa del Duque (Córdoba), al igual que "Pajarito de los ruedos". Su madre, ya fallecida, tuvo conocimiento a través de la Guardia Civil de su muerte en 1947, pero, aquejada de diversas dolencias, nunca fue a ver su tumba. Llevaba sin verlo desde que marchó al frente al comienzo de la guerra civil [14].


A partir de este momento nuestras investigaciones de dirigen en los siguientes frentes:

· Localización de datos en torno a los guerrilleros o enlaces serradillanos que combatieron o colaboraron con las Partidas de "El Francés".

· Obtención del historial militar de los Guardias Civiles que intervienen en el hecho de su muerte a fin de comprobar destinos, condecoraciones, etc.

· Localización de informes policiales y expediente instruido por su muerte (incluidas las fotografías que se dicen existir).

ALIPIO BARBERO ANTON

A.C. "TIERRA VIVA"

Gabjuridico@jazzfree.com

El Francés (artículo)
NOTA DE PRENSA.
El pasado día 13 de noviembre de 2001, y con el objeto de visitar la tumba de "El Francés", acompañados del socio de "Tierra Viva" Santiago Cobos Díaz, comparecieron en Serradilla el exmaquis Gerardo Antón Garrido "Pinto", que fue jefe de una Partida guerrillera de "El Francés", residente en Cáceres, así como los madrileños Andrés Torrico y Alberto LLorente, socios de la Asociación Guerra y Exilio (AGE), los cuales tomaron diversas fotos y filmaron el acto con el objeto de hacer en su día un documental.

En el cementerio tuvieron un pequeño y sentido homenaje, marcando la tumba donde se hallan sus restos, sobre la que fue puesta una pequeña placa conmemorativa que dice:

Aquí yace PEDRO JOSE MARQUINO MONGE

Guerrillero antifranquista

(29/6/1913 - 31/7/1946)

"Mañana cuando yo muera / no me vayáis a llorar /ni me busquéis bajo tierra /soy viento de libertad".

Posteriormente visitaron varios lugares de Serradilla con el objeto de "refrescar" la memoria del guerrillero "Pinto", que combatió junto con "El Francés".


SEGUIREMOS INFORMANDO.

[1] Pedro José Marquino Monge se había incorporado desde los primeros momentos de la guerra civil a las columnas comunistas en defensa de la República. Gran parte de la guerra estuvo en el Frente de Madrid, siendo ascendido al grado de teniente por méritos de guerra. Al finalizar la guerra regresó a su pueblo natal, Hinojosa del Duque (Córdoba), ingresando inmediatamente en la cárcel local (antiguo convento de Carmelitas), de donde se fugó en otoño de 1940. No conseguido ver a sus familiares desde su vuelta de la guerra, ni tampoco se puso en contacto con los mismos en sus seis años de la sierra.

[2] Jesús Bayón González "Comandante Carlos", secretario del Comité Central del Partido Comunista y Jefe de la 1ª División guerrillera Extremadura-Centro, se suicidó junto a Manuel Tabernero Antona "Lyón", Jefe de Estado Mayor de la Agrupación, según ordenaba el código guerrillero, para no caer en manos de la dictadura. Ocurrió durante el llamado Gran desastre de Talavera de la Reina (Toledo), en septiembre del 46.

[3] "Los maquis no fueron bandoleros. Rehabilitados. Ni bandoleros ni malhechores. Ellos fueron la única resistencia armada contra Franco después de la victoria de los militares sublevados contra la República, y sus vidas (en muchos casos, sus muertes a sangre y fuego) y obra representan la tragedia del maquis y la guerrilla en la posguerra. Convertidos en «la oposición más seria al régimen de Franco», según el prestigioso hispanista Paul Preston, vertebraron un auténtico movimiento de resistencia antifascista que sobrevivió más de una década al fin de la Guerra Civil. Luego, a los supervivientes les sobrevino el exilio y el olvido". Así se relataba la noticia en el nº 292 (20/5/01) del periódico EL MUNDO.

[4] Las "estafetas" eran puntos donde los enlaces depositaban información, comida, enseres, …. Podía tratarse del tronco de un árbol, un hueco en una pared, una canchera. Se tiene conocimiento que en la desembocadura del arroyo "Malvecino", en su margen izquierda (derecha del río Tajo), existió una. Hasta las posiciones de las estafetas, dada la vitalidad de la información que de aquellas se recibía, solo llegaban los hombres de mas confianza, impidiéndoselo a los últimos llegados a la sierra o a aquellos que por algún motivo generaran alguna desconfianza.

[5] Archivo Registro Civil de Serradilla (ARCS). Legajo de certificaciones médicas de defunción. En el margen superior izquierdo consta un sello con el escudo franquista que dice: "106 Comandancia de la Guardia Civil. Rural. Puesto de Serradilla".

[6] Con el nombre de Villanueva del Terrible no existe ni ha existido ninguna población en la provincia de Córdoba.

[7] Teodoro García Antón era un veterano Caballero Mutilado por heridas recibidas en la guerra civil, al que la Comisión Inspectora Provincial de Mutilado de Guerra había nombrado encargado del teléfono municipal (27 de febrero de 1939) y el anejo de recaudador de arbitrios municipales (15 de abril de 1939). Salvo Julián Díaz Garrudo, todos han fallecido (noviembre 2001).

[8] ARCS. Libro de defunciones. Tomo 40. Folio 11.

[9] ARCS. Legajo de certificaciones médicas de defunción. El mismo esta confeccionado con la misma máquina de escribir que el realizado por la Guardia Civil, hecho que se aprecia al tener dicha máquina un defecto en la letra "e" que presenta una mayor altura a la línea del resto de la escritura.

[10] Florencio Sánchez Ropero, que entonces contaba con 18 años, nos ofrece el siguiente testimonio (noviembre/01): "Un grupo de unos 14 o 15 chicos entre los 17 y 20 años nos encontrábamos al frescor de la vega del estanquillo, lugar frecuentado en los atardeceres del verano, cuando pasó la comitiva que iba al cementerio. Llevaban un mulo con dos sacos de paja, entre los cuales iba un cuerpo. Alguno de los presentes dijo - ya llevan al rojo muerto - y todos, salvo yo y los hermanos Francisco y Arsenio "coguta", se fueron al cementerio a ver el entierro. Al regresar algunos de los que fueron dijeron que aquella noche no podrían dormir de la impresión que les había causado el haber sido enterrado sin caja, tirándole tierra encima". Mª Josefa Mateos Martín nos indicó (mayo/01): "Yo tenía 15 o 16 años y, aunque nos prohibieron acercarnos, la curiosidad hizo que diéramos varias amigas en el cementerio. Al "Francés" lo enterraron en la tierra, envuelto en una manta, echándole tierra encima. Quedé muy impresionada al ver la forma en que lo enterraron y varios días estuve soñándome".

[11] ARCS. Legajo de certificaciones médicas de defunción. Consta en la parte superior izquierda un sello, con el escudo franquista, que dice: "106 Comandancia de la Guardia Civil. Jefatura. Puesto de Mando". Consta con registro de entrada 432 de 13 de agosto de 1947.

[12] ARCS. Libro de defunciones. Tomo 40. Folio 82. Se añade en dicho acta que se inscribía conforme el art. 83 de la Ley del Registro Civil y al tenor de la identificación llevada a cabo por la indicada 106 Comandancia de la Guardia Civil. Las personas que intervienen en esta segunda inscripción de defunción (Juez de Paz, Secretario y testigos) eran los mismos que en la primera, salvo el testigo Teodoro García Antón, que es sustituido por el funcionario municipal Ezequiel García Morales.

[13] ARC Hinojosa del Duque (Córdoba). Libro de nacimientos. Inscrito al tomo 39, folio 479, Sección 1ª. Al margen de dicho certificado de nacimiento consta la siguiente anotación: falleció el día 31 de julio de 1946 en el sitio Peña Falcón según consta del oficio del Sr. Juez de Paz de Serradilla (Cáceres) en el tomo 40, folio 82. Hinojosa del Duque, 26 de agosto de 1947.

[14] Actualmente hemos podido identificar a los siguientes familiares vivos, hermanos todos ellos de Pedro José: Adelaida Marquino Monge (nacida en 1915), Manuel Marquino Monge (nacido el 12/4/1918). C/ Jeréz y Caballero, nº 26. Hinojosa del Duque (Córdoba). Tf. 957.14.07.15 y Andrés Juán Marquino Monge (nacido en 1929). C/ Cervantes, nº 36. Hinojosa del Duque (Córdoba). Tf. 957.14.12.04.

Luis García


FUENTE: Serradilla

 Enlace: http://lusipedia.blogspot.com.es/2009/01/el-frances.html

OTOÑO ESCÉNICO

Aulaga Folk



El 'Otoño Escénico' de la Diputación llegará a 18 municipios de la provincia

La danza y el teatro tendrán un peso específico en la programación del "Otoño Escénico 2014" que ha organizado la Institución Cultural "El Brocense" de Cáceres y cuya programación llevará actuaciones a 18 municipios cacereños, con conciertos de Amesmalúa y Aulaga Folk, entre otros.                                   En palabras del diputado de Cultura de la Diputación de Cáceres, Eduardo Villaverde, en esta edición han otorgado más importancia al teatro y la danza, sin olvidar la parte musical.                                                                       Flamenco, folk y música cubana se darán cita en el escenario, y el humor también estará presente en el "Otoño Escénico" que se desarrollará del 14 de noviembre al 8 de diciembre.                                                                             El programa incluye 18 actuaciones de 9 grupos y artistas: Aulaga Folk, Amesmalúa, Celia Romero, Franquete, La Casa del Mar, La Estampa Teatro, Marabú, Raquel Cantero y Teatrapo.                                                             Los 18 municipios de la provincia de Cáceres a los que llegará este programa son: Aceituna, Aldeanueva de la Vera, Almoharín, Barrado, Campo Lugar, Carbajo, Jaraíz de la Vera, Logrosán, Madroñera, Monroy, Moraleja, Navaconcejo, Serrejón, Torrejoncillo, Torreorgaz, Trujillo, Valencia de Alcántara y Villasbuenas de Gata.                                                                               Según Villaverde, el objetivo principal es dar cabida a todos aquellos artistas y grupos de la provincia que habitualmente no figuran en otros ciclos de la Institución Cultural "El Brocense", como "Estivalia", "Noches de Santa María" o "Los Conciertos de Pedrilla", que acogen las actuaciones de artistas con una proyección más nacional e internacional.                                                         Así, la Diputación de Cáceres pretende dar salida a las jóvenes promesas del panorama artístico extremeño y, al mismo tiempo, llegar a aquellos municipios de la provincia que durante los meses de otoño e invierno cuentan con menor oferta de actividades culturales y de ocio.                                                                     El calendario de actuaciones comenzará el 14 de noviembre en Monroy, con el concierto de Aulaga Folk, en el Polideportivo Municipal; y con el de la compañía Teatrapo, en la Casa de la Cultura de Moraleja.                                                 El cartel se cerrará el 8 de diciembre, con la actuación flamenca de Celia Romero en la Casa de la Cultura de Torreorgaz.
Enlace de la noticia: http://www.abc.es/agencias/noticia.asp?noticia=1712419